Sueñas con lograr que tu hija luzca hermosos aretes, pero no estás seguro de qué decisión tomar.¿Le gustaría obtener información más específica sobre cómo perforar las orejas de su hijo?¿A qué edad se le puede abofetear la oreja a una niña?¿Es peligroso?¿Hay riesgo de infección?Tratamos de responder a todas sus preguntas.
Tabla de Contenidos
¿Por qué se deben perforar los bebés?
En algunos países, como España, es tradicional perforar las orejas de las niñas cuando son bebés. En el otro extremo, en el Reino Unido, circula actualmente una petición para que se prohíba a los padres perforar las orejas de sus hijos antes de que alcancen cierta edad. Así que el debate se encendió.
Entre estas dos posiciones, siempre depende de los padres perforar las orejas de la niña. Algunas personas lo hacen por feminidad, necesidades estéticas, llevar joyas familiares… Muchos padres no cuestionan esta práctica. Los que no perforan la oreja del bebé pueden provocar una ruptura de la barrera cutánea, que será la puerta de entrada a la infección. De hecho, este es un comportamiento que puede complicarse y conducir a la sepsis.
Otros no quieren causar dolor innecesario a sus hijos. El hecho de que un bebé no se queje no significa que no tenga dolor. Otros padres temen las consecuencias de un piercing. La curación no siempre es fácil, lo que puede ser preocupante.
¿Duele perforar las orejas de tu bebé?
El dolor es una de las principales barreras para los padres cuando deciden perforar la oreja de su bebé. Ya sea un adulto o un niño, una perforación es inevitablemente dolorosa. Entonces, conservamos recuerdos increíbles. Algunas personas tienen recuerdos muy claros de su dolor y trauma que pueden revivir años después.
Un bebé con una oreja perforada aún no puede comprender y racionalizar sus sentimientos. Sin embargo, debe haber tenido dolor por un tiempo. Si la herida es difícil de curar o eventualmente se infecta, será más dolorosa.
¿Perforar las orejas de su bebé puede causar una infección?
Perforar la oreja de un bebé o un niño no es poca cosa. Esta es una intervención en el cuerpo que hace que la barrera de la piel se rompa. Por lo tanto, puede provocar una infección, que a su vez puede empeorar. Afortunadamente, cuando se hace en las condiciones adecuadas, no siempre es así.
Hay dos tipos de infecciones que deben prevenirse:
1/ Infección por virus. Esto sucede cuando el equipo que utilizan los profesionales no cumple con todas las medidas de higiene. Puede deberse a una infección provocada por el virus de la hepatitis.
2/ Infección bacteriana. Ocurrió porque no se esterilizó el equipo y no se atendió la herida. Por lo general, es causada por Streptococcus o Staphylococcus. Esta infección se complica con sepsis o infección del cartílago de la oreja.
Perforar la oreja de un bebé, además de atacar la piel ya sensible, significa abrir la puerta a las bacterias. Este último se infiltrará en un organismo con las defensas muy bajas e inmaduro. Si el niño es resistente, no habrá secuelas. De lo contrario, será necesario un tratamiento antibiótico.
Perforar la oreja de un bebé: ¿dónde y a qué edad?
Si bien no existe una legislación sobre la edad mínima para perforar las orejas de un niño, muchos pediatras recomiendan no hacerlo hasta que el niño tenga al menos 2 años.
Incluso a esta edad, la comunidad médica y los padres, especialmente las madres, tienen opiniones muy diferentes y todos lo experimentan de primera mano de diferentes maneras. Una vez más, esta decisión se basa en mi propia experiencia.
Sobre este lugar, vamos a las joyerías en general, pero no todas aceptan o tienen las condiciones para hacerlo, al menos muy pocas para niños menores de 3 o 4 años. Es importante revisar el equipo que utiliza el joyero, el perforador, sus hábitos y la limpieza de su local para evitar consecuencias contagiosas.
Perforación en la oreja del bebé: precauciones a tomar
– Elija con cuidado dónde quiere perforar las orejas de su hijo: asegúrese de que el profesional tenga un lugar específico para realizar el procedimiento y que el equipo utilizado sea de una higiene impecable.
– Elija aretes de alta calidad hechos de material hipoalergénico (preferiblemente oro) para evitar el riesgo de alergias e infecciones. El tallo (es decir, la parte que atraviesa el lóbulo de la oreja) también debe ser lo suficientemente delgado para no molestar al niño y acelerar la curación. Finalmente, asegúrese de que la punta de la varilla esté redondeada para evitar dañar la parte posterior de la oreja.
– Los aretes para bebés deben ser lo más simples posible para que no se rompan al quedar atrapados en la ropa o la ropa de cama.
– Vigile atentamente a su hijo durante algunas semanas después de la operación para que cualquier infección pueda detectarse lo antes posible. Además, no olvide que las joyas a menudo están prohibidas en las guarderías y las escuelas, por lo que perforar las orejas de las niñas que no pueden usar aretes es desafortunado.